He aquí mi traducción sobre el artículo de 16-3-2011 sobre lo escrito por BXVI sobre los judíos en su nuevo libro Jesús de Nazaret II. Con esta segunda traducción añadimos otro sobre el libro de BXVI a nuestro artículo sobre la negación de la Cena Pascual por Jesús .

El artículo original puede verse en el sitio  Traditioninaction

Los textos bíblicos son del Nuevo Testamento Trilingüe de Bover-O’Callaghan.

Antonio Vicente, traductor.

Marcos Stabinski

El director de American Jewish Committee David Rosen, el primer ministro israelí Benjamin, el director de Anti-Difamación Abraham Foxman se encuentran entre los que en nuestros días elogian a Benedicto XVI por escribir un libro- Jesús de Nazaret II- en el que claramente se exonera al pueblo judío por la muerte de Jesucristo. (1)

Novedad en la formación de los seminaristas en Roma:No hay que convertir a los judíos

En el libro que fue publicado el 10 de  marzo, Benedicto XVI afirma que los que querían que Jesús fuera crucificado fueron los de  la «aristocracia del templo» y no «el pueblo judío en su conjunto.» «¿Cómo podría todo el pueblo estar presente entonces clamando por la muerte de Jesús?» ; pregunta Benedicto XVI.

Afirma  que el pasaje de las Escrituras donde la multitud judía grita » que su su sangre caiga sobre nosotros y sobre nuestros hijos» ha sido mal interpretado porque la muerte de Cristo no era para conseguir un castigo, sino más bien  para traer la reconciliación. No se vierte en contra de nadie,  sino que es derramada por muchos, por todos.»

También insta a la gente a dejar a los judios a su aire, diciendo que Israel está en manos de Dios, que lo guardará «como un todo’ hasta el momento propicio, cuando el número de los gentiles  se haya completado»  Dice que los cristianos deben «esperar a que el tiempo fijado por Dios» en lugar de evangelizar al pueblo judío.

Esto contradice las Escrituras y el pasado Magisterio

Con esa declaración el Papa contradice de plano  las mismas Escrituras , así como al Magisterio de la Iglesia en el pasado. Es otra afrenta hecha a la Religión Católica y una ofensa grave que no puede ser ignorada por los católicos.

Las Escrituras son muy claras al decir que para que se salven  los hombres deben aceptar al Señor Jesucristo como Salvador y sus enseñanzas. También dicen claramente que el pueblo judío en su conjunto sería castigado por rechazar a Cristo. Considere estos textos entre muchos(2):

Regocijo con los rabinos en la Sinagoga de Roma , a continuación , las confidencias con el jefe rabino Riccardo Segni

• Y Él les dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda la creación. El que creyere y fuere bautizado, se salvará: mas el que no creyere, será condenado. (Mc 16, 15-16)
• Quién es el mentiroso, sino el que niega que Jesús es el Mesías? Este es  el anticristo,el que niega al Padre y al Hijo. (1 Juan 2:22)
• ¡Jerusalén, Jerusalén,  la que mata a los profetas y apedrea a los que le han sido enviados¡ ¡Cuántas veces quise reunir a tus hijos como la clueca a su pollada debajo de las alas y no quisistéis¡ He aquí que vuestra casa se os deja. Y os certifico que no me veréis ya hasta que venga el día en que digáis  ¡Bendito el que viewne en el nombre del Señor¡ (Lc 13, 34-35)
• ..los Judios, los cuales  no contentos con matar al Señor Jesús y a los profetas, también a nosotros nos persiguieron: que no agradan a Dios y  son contrarios a todos los hombres … obstinados siempre en colmar la medida de sus pecados pero está para descargar sobre ellos la ira hasta el colmo. (I Tesalonicenses 2:14-16)

La declaración de Benedicto XVI  contradice también la constante enseñanza de los Padres de la Iglesia. Por ejemplo, San Ambrosio, uno de los cuatro grandes Padres de Occidente, no tiene miedo de enseñar esta verdad: » La infidelidad de la Sinagoga es un insulto para el Salvador. Por ello  Él escogió la barca de Pedro, y abandonó la de Moisés, es decir, él rechazó a la infiel Sinagoga, y prohijó a  la fiel lglesia» ( Sermo 37, Las dos barcas).

El pensamiento del Papa Ratzinger en su nuevo libro  no es el de los papas y concilios. En el Concilio de Florencia, el Papa Eugenio IV hizo este  pronunciamiento ex cathedra: «La Santa Iglesia Romana firmemente cree, profesa y predica que todos los que están fuera de la Iglesia Católica, no sólo paganos, sino también los  Judios, herejes y cismáticos, no pueden participar de la vida eterna e irán al fuego eterno, preparado para el diablo y sus ángeles, a menos que se unen a la Iglesia antes del final de su vida. «( Cantate Domino , 1441).

El mismo Papa no acepta que los judios se puedan salvar sin aceptar a Cristo como Salvador: «Quien quiera salvarse, necesita ante todo mantener la fe católica … Es necesario para la salvación eterna que también crean fielmente en la Encarnación de nuestro Señor Jesucristo … que el Hijo de Dios es Dios y  hombre. «(Concilio de Florencia, 1439).

No es la primera vez …

Los lectores que supongan  que esta es la primera vez que Benedicto XVI ha propuesto este novedoso pensamiento se equivocan. Este papa,  que ha sido siempre un defensor del método histórico modernista de la interpretación de las Escrituras, ha afirmado reiteradamente que los judíos pueden salvarse sin Cristo.

En Milestones (1998), el entonces Cardenal Ratzinger dijo que llegó a la conclusión de que: «El judaísmo y la fe cristiana tal como se expresa  en el Nuevo Testamento son sólo dos maneras de hacerse cargo de las Escrituras de Israel, dos caminos que, en resumidas cuentas,  están  determinados  por la posición que se asuma con respecto a la figura de Jesús de Nazaret. La Escritura que hoy llamamos Antiguo Testamento está en sí misma abierta a las dos posiciones»(P. 53-54)

Una visita cordial a la sinagoga del  Parque del Este en Nueva York (abril de 2008)

En otro libro Dios y el mundo (2000), declaró que sin duda es posible leer el Antiguo Testamento sin referencia a Cristo. Y continúa: «Y si  los Judios no ven  las promesas que se cumplen en Él, no se trata de mala voluntad por su parte, sino realmente a causa de la oscuridad de los textos. … Hay  buenas razones, entonces, para negar que el Antiguo Testamento se refiere a Cristo y para decir, ‘No, eso no es lo que dice‘. «(P. 209)

En 2001, la Pontificia Comisión Bíblica publicó un libro titulado » El pueblo judío y sus Escrituras Sagradas en la Biblia cristiana. Este libro rechaza el dogma de que la Antigua Alianza se cerró con la venida de Nuestro Señor. Enseña que la Antigua  Alianza está todavía abierta, y que  la esperanza  de los judíos acerca de  la venida de su Mesías debe ser aceptada por los católicos. Se enseña que Jesús no tiene necesariamente que ser visto[ does not have to be seen as] como el Mesías profetizado,  sino que es posible verlo como lo hacen los judíos, sin ser el  Mesías y  el Hijo de Dios. (3) Como Prefecto de la CDF, Ratzinger dio su  aprobación a la ortodoxia teológica del libro, y escribió el prefacio del libro.

En  el mencionado libro Dios y el mundo, afirma rotundamente que debido a su fidelidad a Dios, los Judios «no están excluidos de la salvación.» (Pp. 150-151)

Dolorosa perplejidad

El Espíritu Santo divinamente  ha revelado a por medio de S. Pablo que los partidarios del judaísmo talmúdico (las «ramas naturales» que se «desgajaron» de la Viña de Cristo y del Árbol de la Vida), aún pueden ser injertados en el  único árbol salvífico»si no permanecieren en la incredulidad «(Hechos 27:31)

Exonerando  a los Judios por la muerte de Cristo

¿Cómo, puede entonces un Vicario de Cristo, hacer declaraciones antitéticas con el plan divino de Dios? ¿Cómo  puede un Sucesor de Pedro dejar de trabajar con ardiente  celo  y  hacer todo lo posible para cambiar a los judíos talmúdicos de nuestros días, en su increencia en Nuestro Señor y Salvador y convertirlos a la Fe Verdadera?

¿Qué entendimiento perverso de la caridad o el amor de Dios y al prójimo permite que los  Vicarios de Nuestro Señor en la tierra (los Papas de la Iglesia Conciliar) puedan  confirmar varias repetidamente a los judíos talmúdicos en sus errores y ampliar aún más esta «ceguera espiritual?

¿Es que  estos papas  no creen en el juicio decretado por el Señor para todos los «incrédulos», y muy especialmente para los incrédulos de su propia raza, ya que recibieron gracias, bendiciones, luces y verdades como  pueblo suyo elegido, y que  que  a otros nunca se les dio con anterioridad a su primera venida?

¿Cómo puede alguien encontrar una «hermenéutica de la continuidad» en estas contradicciones flagrantes entre las opiniones de Benedicto XVI y la enseñanza perenne de la Iglesia Católica?

No creo que algún mago ecuménico vaya a dar una poción mágica capaz de hacer que estas enseñanzas hostiles al anterior Magisterio sean agradables al Dios Eterno y Trino.

1. «Israel saluda  al Papa»por la claridad, el coraje ‘en la muerte de Jesús «, AFP, 04 de marzo 2011
2. Véase también el Rey 9:6-9, Jn 09:41, Mt 23, 31-35, Mt 27:50-61, Hebreos 7:13, Hebreos 10: 9-10, 2 Corintios 3:13, Romanos 11:18 -21, Jn 5, 39, 45-47.
3. El pueblo judío y sus Escrituras Sagradas en la Biblia cristiana, Sección II, A5, A7.