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PETRUS ROMANUS


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Esta entrada es un corolario de la hecha anteriormente » El lema In persecutione….»  En ella establecimos la hipótesis, en nuestra opinión mucho más probable que las contrarias, de que dicho lema no es un verdadero lema, sino la introducción al lema Petrus Romanus. Al demostrarlo, casi ya se ha establecido que Petrus Romanus es un verdadero lema personal, puesto que es la única posibilidad que queda para adscribir a él, el pontífice de la  Sede Romana, que será elegido dentro de pocos días.

La cuestión de que si es una clave simbólica de la profecía o un lema personal estará, pues, resuelta en los próximos días.

Solo nos queda estudiar el lema en sí, estableciendo la importante cuestión de si el lema termina en las palabras Petrus Romanus o si el comentario que le sigue, separado por una coma, pertenece al cuerpo de la profecía o no pertenece. Estaría inspirado por lo tanto si la profecía fuera verdadera.

En el caso de que  dicho comentario no fuera del autor, habría que despojarlo de su valor profético, y adscribirlo a uno más de los comentarios de Alphonsus Ciaconus, R.P.Allfonso Chacón O.P.,  notable historiador eclesiástico, de quien se habla al final de la profecía, que como se sabe comentó los lemas anteriores a la publicación hasta el lema 74 correspondiente al papa Urbano VII «De rore coeli». 

Al final de la profecía se dice:

«Quae ad pontifices sunt adjecta, non sunt ipsius Malachiae, sed R.P. Ciaconis (sic, como si fuera  genitivo de Giaconus) Ord. predicatorum, huius prophetiae interpretis

Lo que se añade a los pontifices, no son del mismo Malaquias sino de R.P. Giaconis,  de la Orden de  Predicadores, intérprete de esta profecía.

Ahora bien Chacón comenta los lemas anteriores a la publicación, hasta Urbano VII. Los lemas en cuanto a la forma siguen una pauta común que es ésta:

Siguen al nombre del pontífice que ha puesto Chacón como aquél a quien toca el lema correspondiente. Después de cada lema hay un punto (a excepción del lema 9, Ex ansere custode (en el que no se aprecia dicho punto. Omisión que quizás es una errata). En columna bien separada van los nombres de los pontífices puestos por Chacón. Todos ellos terminan con un punto. Y en columna separada va el comentario después de ese punto. Los comentarios comienzan a veces por un relativo como  qui,   o cuius, y más frecuentemente sin relativo, con una frase explicatoria que suele comenzar por una mayúscula,  salvo en algunos pocos lemas cuyo comentario comienza por una minúscula (antea, familia, filius..)

La pauta que nunca falla es que el lema acabe en un punto (salvo Ex ansere custode, nº 9 ) y que el nombre del pontífice siempre acabe en un punto. O sea el lema siempre viene después de un punto, nunca después de una coma o de un nombre sin punto. 

Esto es importante porque nos dará la pauta para saber si lo que sigue a Petrus Romanus  es un comentario de Chacón o no. 

Mi hipótesis que considero altamente probable es que no es un comentario de Chacón sino que es un comentario del autor de la profecía, y por consiguiente sería un comentario igualmente inspirado como los lemas posteriores al nº 74, y en caso de ser la profecía cierta habría que tenerlos en cuenta como los lemas, por lo menos los posteriores al nº 74,  que son posteriores a la publicación, que todos van sin comentario (a excepción de los dos últimos 112, y 113) y están todos en la última página.

El lector puede ver al final del post las fotografías donde puede comprobar lo que he dicho y lo que diré más adelante

Tengamos ante los ojos el texto de los lemas 112 y 113.

1º ed.

In psecutione. extrema S.R.E sedebit. 

Petrus Romanus, qui pascet oves in multis tribulationibus; quibus transactis civitas septicollis diruetur & Iudex tremendus iudicabit populum suum.Finis.

 En la persecución  última  de la Santa Romana Iglesia reinará.

Pedro Romano, que apacentará a las ovejas en medio de muchas tribulaciones; pasadas las cuales la ciudad de las siete colinas será destruida y el Juez tremendo juzgará a su pueblo. Fin.

2ª ed.. Igual que lo anterior a excepción del punto después de persecutione.

3a ed.

In persecutione extrema S.R.. sedebit petrus Romanus,  qui pascet oves in multis tribulationibus; quibus transactis civitas septicollis diruetur & iudedex tremenus iudicabit populum suus. FINIS.

En la última persecución reinará Pedro Romano que apacentará a sus ovejas en medio de muchas tribulaciones, pasadas las cuales la ciudad de las siete colinas será destruída y el juez tremendo juzgará a su pueblo. FIN.

Pues bien establecemos que los dos últimos lemas-112 y 113- deben leerse precisamente con la tipografía de la tercera edición y además que lo que sigue a Petrus Romanus separado por una coma, es un comentario del autor de la profecía y no de Chacón.

Las razones para decir esto las resumo así:

1).  Tiene una importancia excepcional el que Petrus Romanus termine en una coma y no en un punto como suele suceder depués de los lemas comentados por Chacón hasta el nº 74.

2) No se puede aceptar el decir que Chacón haya sido su autor por lo ya dicho en el post que estudia In persecutione y que ahora transcribo:

Igartua establece gratuitamente que  Chacón ha puesto  únicamente un comentario [después del de Urbano VII en el lema 74 hecho en vida de Chacón] añadiendo como estimamos- .  Igartua confiesa en las palabras como estimamos que es una suposición, en mi opinión gratuita.

3. Igartua también admite que  Chacón lo hace por ser el último comentario, pero acto seguido  se corrige diciendo que  (o a los dos últimos) lo que quiere decir que también admite la posibilidad de que a continuación de Petrus Romanus podría ir otro comentario de Chacón, explicando que Chacón  lo haría  según lo que él mismo  entiende que  es el sentido de la profecía.

4. Estas dos últimas suposiciones las admite basándose en en el añadido de Wion, al publicar la profecía en su Lignum Vitae. “Añadió a los Pontífices (los comentarios ). Pero yo creo que me parece gratuito decir que Wion se refería  no únicamente a los comentarios hechos a los lemas anteriores a Urbano VII,  por el historiador Chacón- perfecto conocedor de los pontificados anteriores a la publicación, conocedor también con certeza de la obra de  Pannivio  “Epitome Romanum..”, en donde constan los escudos de los papas anteriores y también medallas y otras circunstancias  de los Pontífices sobre los que se hacen lo lemas,  anteriores a la publicación, e incluso a su propia vida-  sino también a otros comentarios de los dos- o uno- últimos lemas.

En efecto los comentarios  hasta Urbano VII es comprensible que los haya hecho Chacón, pero los de los supuestos últimos lemas es una suposición enteramente gratuita. Más bien habría que pensar que un historiador tan concienzudo como Chacón no se habría atrevido a poner algo de su cosecha- dando la peregrina razón, dicha por  Igartua , de que lo hizo porque le pareció ofrecían un sentido que se podría anticipar- . Pero si se tiene en cuenta que HABLAR DE UNA PERSECUCIÓN A LA IGLESIA Y HABLAR DE UN JUICIO/CASTIGO DEL SUPREMO JUEZ A SU PUEBLO DESTRUYENDO ROMA-  es algo que nadie pueda anticipar , diremos que mucho menos lo anticiparía, un historiador concienzudo de los  acontecimientos históricos que él acostumbraba a historiar.

En consecuencia, lo dicho por Igartua estableciendo que hay un comentario de Chacón después de In persecutione,  o dos si también admitimos esto después de Petrus Romanus, en mi opinión,  no es más que una suposición gratuita.

Chacón no haría eso a menos que él fuera el autor de la profecía. Y entonces todo sería  inspirado: también los dos últimos comentarios de los dos, o de uno solo,  últimos lemas.

Una corroboración de lo que voy diciendo es la tercera edición de la profecía en 1624. (sólo 29 años más tarde de la primera y 26 de la segunda)

3. Entonces por los dos puntos expuestos hay que decir que

a/ In persecutione no es un lema seguido de un comentario de Chacón.

  b/ Petrus Romanus es un lema personal, pero va seguido de un comentario no de Chacón sino del autor de la profecía.

  c) El comentario gozaría de tanta inspiración como la entera profecía, en particular a partir del lema 74, después de la publicación.

   e) La única lectura acertada es la que se desprende de la tipografía de la tercera edición que es la que todos conocemos y la que casi todos (menos Dehín e Igartua) han sostenido.

Los dos lemas últimos, el 112 y el 113, se juntan en un único lema que es el úlltimo y debe leerse así:

En la última persecución reinará Pedro Romano que apacentará a sus ovejas en medio de muchas tribulaciones, pasadas las cuales la ciudad de las siete colinas será destruída y el juez tremendo juzgará a su pueblo. FIN

Ahora, lo que sigue va dicho como un pronóstico que si fuera equivocado– suele ser lo más probable cuando se hacen pronósticos anteriores a la elección de los pontífices- lo comprobaremos en los próximos días al que escribo ésto, día 8 de febrero quizás a poca distancia del día de resolución del cónclave.

Aquí copio lo ya dicho en el post  Apuestas con San Malaquías

QUIÉN SERÁ ELEGIDO

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Teniendo todo esto en cuenta, me atrevo a decir que el Cardenal Tarsicio Bertone podría ser muy bien el elegido. Según tengo entendido él es de nombre Pedro y nacido en una villa que lleva el nombre de Romano.

El ocupó durante muchos años puestos en Roma,  más importantes quizás que ningún otro, al revés de otros cardenales que vienen “de fuera” y no han sido curiales.

Tampoco hay que olvidar que es salesiano, de la familia de San Juan Bosco. Ahora bien ningún santo como él ha dado  varias profecías tan extensas, sobre el destino de la ciudad de Roma, sus vicisitudes y en particular  las que tienen que ver con su destrucción (tal como leemos en la profecía)

También observamos que el Cardenal Bertone ha estado muy involucrado en la publicación y explicación del supuesto Tercer Secreto de Fátima, en junio del año 2000, en el que como saben se describe una pintura  muy relacionada con las profecías de San Juan Bosco, sobre los avatares del vaticano víctima de un ataque con el papa huyendo entre cadáveres.

¿Hay otras características, que le hagan singularmente relacionado con Pedro romano?

Edito antes del  Cónclave una noticia que hablan de dos facciones entre los cardenales en los días que preceden al  Cónclave, los «Romanos  y los extranjeros»

El nuevo papa: Pugna de «romanos» y «extranjeros»

redacción / la voz  09 de marzo de 2013 05:00
2 votos

Los cardenales Di Nardo, Wuerl, Levada y George acceden al precónclave. DYLAN MARTÍNEZREUTERS

El  precónclave que congregó estos días a los cardenales ha sacado a la luz la división de estos en dos bandos, extranjeros y romanos. Los primeros exigían detalles del informe de Ratzinger como condición para fijar la fecha del cónclave. Los romanos (la curia) intentaban zanjar cuanto antes el conflicto.

 ¿Qué defienden «romanos» y «extranjeros»?

Con alguna adhesión puntual, los romanos son cardenales de la curia romana (conjunto de órganos de gobierno de la Santa Sede). Están apegados a la tradición …

. La prensa de EE.?UU. acusó a Bertone y habló de «mordaza vaticana», pero también de la referencia que los extranjeros acababan de hallar en Dolan, O?Malley y compañía.

Hay tensiones muy fuertes. Por ejemplo, la de Joachim Meisner, cardenal de Colonia, con Tarcisio Bertone. Meisner reconoció en una entrevista en el diario Rundschauen, de Fráncfort, que en nombre de un grupo de cardenales pidió a Benedicto XVI que destituyese a Bertone como secretario de Estado.

Pues es sólo un ejemplo para corroborar que al cardenal Tarsicio Bertone le cae como anillo el dedo el apelativo de Romano. De hecho junto al card. Solano les atribuyen ser las cabezas de la facción romana a quien se atribuirīa ianmovilismo. Casi nadie desea que esta facción llegue al poder por eso Bertone está mal visto y un tanto bajo en las encuestas.

 

Después del «pronóstico» anterior sólo me queda decir  que, en mi opinión que puede estar equivocada, el lema conviene más al Cardenal Bertone que a ningún otro Cardenal. Por lo menos hasta donde yo sé.

En la profecía sucede a veces que un lema podría también decirse de otro papa de la lista. PERO NUNCA HA SUCEDIDO QUE UN LEMA CONVINIERA A OTRO PAPA CON MÁS PROPIEDAD QUE AL CORRESPONDIENTE PAPA DE LA LISTA.

Si aplicamos lo anterior a la elección del nuevo papa, quizás habría que decir que el lema Petrus Romanus, conviene con más propiedad al Cardenal Bertone que a ningún otro cardenal.

En la hipótesis de que esto fuera cierto, si saliera elegido otro cardenal distinto a Bertone sería un indicio de que la profecía podría ser  falsa, es decir no es auténtica, ni inspirada.

Con todo aunque Bertone fuera el nuevo papa, no por eso se podría atribuir a la profecía el carácter de certeza. Solamente le  atribuiríamos una gran probabiliad.

LA CERTEZA DE LA PROFECÍA SOLO LA OBTENDREMOS- CON BERTONE O SIN ÉL- CUANDO SE CUMPLAN LAS ÚLTIMAS PALABRAS DE LA PROFECÍA.  SI SUPIÉRAMOS QUE NO SE CUMPLIRÁN NUNCA O SE CUMPLIRÁN FUERA DEL PONTIFICADO DEL PRÓXIMO PAPA, ENTONCES PODRÍAMOS DECIR QUE LA PROFECÍA ES FALSA. PERO SIEMPRE QUEDARÁ COMO ALGO ENIGMÁTICO POR LOS CUMPLIMIENTOS ASOMBROSOS DE ALGUNOS LEMAS, A TANTA DISTANCIA DE SU PUBLICACIÓN Y ADEMÁS CORREPONDIENTES A UN PAPA DE UNA SERIE EN EL TIEMPO.

A  continuación las fotografías de la profecía tal como aparecen en la 1ª edición y una de ellas con el final de la profecía en las tres primeras ediciones.

 Véase abajo la reproducción- en 4 hojas- fotográfica de la profecía rigurosamente transcrita tal como puede verse en el libro «Lignum vitae..» de Arnaldo Wion. Los número al margen izquierdo de los lemas están añadidos  para comodidad de su estudio. Igualmente el título de la parte superior «Texto de la profecía impreso por Wion en 1595.

primera hoja de la reproducción de la profecía, en el libro «Lignum Vitae…» cuyo autor es Arnaldo Wion, publicado en 1595, 1ª edición.

2ª hoja de la profecía en el libro «Lignum Vitae», cuyo autor es Arnaldo Wion, publicado en 1595, 1ªedición

3ª hoja de la profecía en el libro «Lignum Vtae» de Arnaldo Wion, 1ª edición 1595

4ª hoja de la profecía en el libro de Arnaldo Wion publicado en 1595, 1ª edición.

4ª hoja de la profecía en la primera edición de 1595

A continuación de ello,  ponemos la reproducción fotográfica de los dos últimos «lemas» el 112 y el 113,  «supuestos» comentarios en las tres primeras ediciones.

En la fotografía superior se aprecia el texto de los dos últimos «lemas» respectivamente en la 1ªed.(1595), en la 2ª ed. (1598) y 3ª ed. (1624)

8 respuestas »

  1. Veo que el honorable blogger sigue empeñado en su teoría, y en sostener que la profecía es catastrofista y apocalíptica.

    Visto que nos queda poco para saberlo, (a no ser que se alargue el cónclave, cosa a día de hoy poco probable), me limitaré a reiterar mi posición:

    1. En la paleografía irlandesa, esa P nunca es pre, sino pro, y hay que tener en cuenta que quien tomó nota de la profecía cuando san Malaquías tuvo su rapto profético, era sin duda alguno de los monjes irlandeses que lo acompañaban. ésto se puede comprobar con los libros escritos por los monjes escotos de Luxeuil, o Bobbio, en Italia, como alguna vez me enseñó el llorado y venerable Fr. Jorge de Burgos, antes de fallecer en malhadado incendio, rodeado de sus amados libros.

    2. Durante buena parte de la Edad Media, se desconocieron otros signos de puntuación que no fueran el punto. Por ende, ni siquiera comas. Nuestros signos de puntuación vienen de la necesidad que tenían los clérigos de poner en las lecciones del Oficio, en las Epístolas y Evangelios de la Misa, y en las que se hacían en el Capítulo y el Refectorio, unos signos que dividiesen el texto en frases que pudieran resaltar mejor el sentido de lo que estaban proclamando, (cantado todo ello en canto llano gregoriano, como Dios manda, y los clérigos actuales han olvidado por completo) con flexas, medianas y puntos.

    (Era una de las primeras cosas que se le enseñaban a un novicio, a puntear las lecciones que tenía que cantar, muchas veces de memoria, desde el facistol del coro, en medio de los Maitines de medianoche).
    Por eso, por ejemplo, cuesta tanto interpretar los textos antiguos, las Bulas papales antiguas, por ejemplo, porque llevan muy poca puntuación, y dependen mucho más del contexto para su recta interpretación. Por esa razón, el texto original de la profecía, que acaba en sedebit, no conoce la coma, que sin embargo, sí aparece en los comentarios de Chacón, sobre todo el último en que se habla de Petrus Romanus.

    Tendría perfectamente sentido que dijera: In PRO secutione, a continuación, (coma, aquí sustituida por un punto, único signo de puntuación habitual), seguida con toda lógica por lo siguiente de la frase, sin mayúscula, la Santa Iglesia Romana reinará suprema.

    Ese es el final de la profecía, y también su causa final, puesto que fue dada a instancias del Papa Inocencio II, que deseaba conocer cuándo acabarían los infortunios de la Santa Iglesia Romana, por entonces ocupada por un antipapa, como hoy día…

    3. El autor indicado como supuesta fuente para los lemas anteriores a la publicación no se llama Pannivio, sino Panvinio, y lo que dice sobre las circunstancias de los Papas, escudos, etc… puede comprobarse con otras fuentes.

    4. Ni in psecutione, ni otra cosa posterior son lemas, que se han agotado con Gloria Olivae. Son, respectivamente, la parte conclusiva de san Malaquías, que nos abren la puerta a la Edad consolativa de la Iglesia, que se abrirá con la designación divina del Gran Papa, o Papa Santo, o digno pastor, profecías de las que aquí nos hemos hecho eco,

    y, desde Petrus Romanus, el comentario del pobre Chacón, que aquí, comete uno de las más sensacionales errores de interpretación de todos los tiempos…

    Porque interpreta que, no habiendo ya más lemas después de Gloria Olivae (según sentencia común, señalaba la conversión de los judíos), o después de In Persecutione, si lo tomó como un lema, para él, debía significar que ya no habría más Papas. Y como es de fe que Pedro tendría perpetuos sucesores, era evidente para él que se trataba del fin del mundo. Debió de pensar como nuestro honorable blogger, y muchos otros, que según el estilo de abreviaturas que él conocía, el de la Cancillería romana, ponía per, así que lee:

    Último lema: In persecutione. extrema Sancta Romana Ecclesia sedebit.

    En la persecución. Reinará estando en su extremo (es decir, su fin) de la Santa Iglesia Romana. (en ablativo, pues)

    Y hace el comentario oportuno, según el estilo que hemos visto, primero el nombre, luego un relativo y la explicación, que, no lo olvidemos, tiene que demostrar el acierto del lema señalado. Para Chacón, no cabe duda del acierto: Es el Papa último, el del extremo (el fin) de la Iglesia Romana, así que no puede llamarse de otra manera que Pedro el Romano, igual que su primer predecesor, y es que está destinado a apacentar a su pueblo en las tribulaciones ocasionadas por la más feroz y completa de las persecuciones, la del último y definitivo Anticristo, así como a ver su Ciudad destruida, y a ver el Sumo Juez volviendo en gloria y majestad…

    Para él, todo concuerda, bordado.

    Una vez cometido el primer error, todos los demás, arrastrados por la autoridad del insigne historiador, (Magister dixit), van a seguirle en esa brecha, siendo muy pocos los que se atrevan a contradecirlo.

    Los comentaristas hodiernos, imitando en esto a ciertos teologastros, que no saben hacer otra cosa que amontonar sentencias de teólogos, sin penetrar en los motivos y la fuerza probativa de sus argumentos respectivos, deberían oír a santo Tomás de Aquino, que decía: Argumenta doctorum, non numerandi, sed ponderandi sunt.

    Si se corrige el error cometido al principio, cae también toda la interpretación pesimista y apocalíptica, que ha hecho la fortuna de la profecía, (puesto que contribuyó a su fama), así como su desgracia, (porque ha velado su verdadero significado).

    Su sentido auténtico coincide totalmente con otras decenas de profecías, como por ejemplo ésta:

    http://moimunanblog.wordpress.com/2013/01/15/la-venida-de-un-digno-pastor/

    y lo que nos anuncia, es el triunfo de la Iglesia Romana, después de siglos en que los Papas vieron cómo una inmensa conspiración empezaba en tiempos de Inocencio II, en pleno siglo XII, cuando los talmudistas y los cátaros pusieron en muy serio peligro a la Sede Romana, sentando un antipapa marránico en san Pedro, haciendo que por muy largos períodos de tiempo, los Papas ni siquiera pudieran residir en la propia Roma, y cómo esa misma polimorfe conspiración seguía avanzando y progresando siglo tras siglo, hasta conocer su paroxismo en el Siglo XX, en que ha ido de triunfo en triunfo, ha logrado sentar a varios antipapas en el trono de san Pedro, ha hecho salir fuera de la Iglesia Visible a toda su jerarquía, han invalidado casi todos sus sacramentos, y acaban de cosechar una nueva victoria, haciendo que el papado se vea un poco más envilecido si cabe, con la tartúfica renuncia de Benedicto XVI.

    Ya se sabe, cuando más cerca está el alba de un nuevo día, es cuando las tinieblas se hacen más espesas, haciendo que muchos teman que no vuelva a amanecer nunca más…

    Háganme caso, lo que haga o deje de hacer el inminente seudo-cónclave es irrelevante, porque esos ya no pertenecen a la Iglesia desde hace mucho. Aunque saliera elegido un Ravasi que empezara otra Revolución cultural a la china dentro de lo que queda de católico en la Iglesia conciliar, eso sólo serviría para acelerar su fin.

    Los conciliares están destinados a ir de victoria en victoria, ¡hasta la derrota final!

    http://www.mejoradeprocesos.org/de-victoria-en-victoria-hasta-la-derrota-final

    Estamos totalmente seguros de que Dios intervendrá, y designará un Papa según Su Corazón, santo, sabio y enérgico como un san Nicolás I Magno
    http://ec.aciprensa.com/wiki/Papa_San_Nicol%C3%A1s_I

    (hoy día tan desconocido), un san Gregorio VII, un Paulo IV o un san Pío V.

    ¿Cómo se realizará ésto? Les daré solamente una pista, guardando para más adelante una mejor explicación:

    En éstos días conclávicos, pocos se acuerdan de que el derecho electoral aún vigente no sólo reconoce como método válido la elección por votos escritos en papeletas, sino que también indica como posibles la elección por compromiso, en que sólo un pequeño número de cardenales eligen, visto que la elección ha quedado bloqueada por no poder llegar nadie a los dos tercios.

    O bien, la elección por aclamación O CUASI INSPIRACIÓN, en la que todos los cardenales prorrumpen a una, movidos por el Espíritu Santo, en aclamar a uno de los suyos como Papa. Situación no desconocida en la historia.

    Pueden ver una reconstitución bastante fidedigna en la película «las sandalias del pescador».

    Visto que ya no existe ningún elector ordinario, el día en que Nuestro Señor señale, de modo milagroso, a Su elegido, los fieles aún dignos de ese hermoso nombre se pondrán instantáneamente bajo sus órdenes, movidos por el Espíritu santo, y operarán a través de ese hecho la operación jurídica requerida por el derecho para la indudable validez de la elección papal.

    No cabe duda, vivimos «tiempos interesantes»…

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  2. Muy Apreciado Fr. Eusebio:

    (Iniciando de abajo hacia arriba!… rompamos lo usual)
    De la cita que Vd. hace «tiempos interesantes», yo sabia o la ubicaba como una maldicion, castigo o eufemismo para condenar a alguien a que padeciese, sufriese y soportase «tiempos interesantes»… Si mi memoria no me falla, la cita Ian Fleming en «solo se vive dos veces»… y algunas referencias a este castigo o maldicion en ese sentido… http://interestingtimes.blogspot.mx

    Coincido totalmente con su apreciacion, y deduzco que maomenos la realidad andara en esa direccion…

    (Claro!, la realidad no necesita de nuestra aprobacion!, pero, para nosotros, es un elemento indispensable para poder comprobar la validez de nuestras creencias… si nuestro esquema es capaz de predecir rectamente el desarrollo o desenvolvimiento de la realidad, señal es de que el esquema o deducciones-base no pueden andar muy desencaminadas)

    Asi que soy tambien de la opinion de que los Catolicos (y Dios nos asista a contarnos entre ese numero!!!) sabran cuando un Papa vuelva a decir

    «Levantaos, ovejas del Señor!… Caminad en la Luz de la Verdadera Doctrina Catolica… Yo, Pedro, Servidor del Señor, y en su nombre, decreto y declaro que tales y tales doctrinas profesadas y enseñadas por los que previamente estuvieron apoltronados ilicitamente en el Trono Petrino, son anatemas, y que de aquellos de ustedes, los hombres, que sigan adhiriendose a tales y cuales ideas, estaran fuera de la Verdadera Iglesia de Cristo

    Yo, en cuanto a Pedro, Sostengo y enseño que la Iglesia Catolica no tiene mas que un solo sacrificio del Altar, que es el que la Unica Arca de Salvacion ha tenido como Oracion Perfecta desde su fundacion, y que este Unico Sacrifico del Altar es el indicado por nuestros Predecesores de feliz memoria desde el Santo Concilio Tridentino

    Elevad vuestros corazones al Señor, porque les ha permitido ver la hora en que la Iglesia recobre toda su Hermosura… Limpiaremos y purgaremos los errores que han envenenado la Viña del Señor… quiza la reguemos con nuestra vida, para que vuelva a fructificar frutos abundantes, dignos de dar Gloria al Creador de la Iglesia…»

    Ya se respira en el aire, la aun lejana brisa primaveral que traera la luz, el solaz y el reverdecer a los resecos corazones de los hombres… Oimos el rugir de la tormenta del hombre, que intenta derribar al Unico Dios, y a su Unica Iglesia del gobierno de este mundo, escuchamos el clamor, la destruccion, el caer de las ruinas del hombre, que aplastan bajo sus escombros a una humanidad que ha preferido las tinieblas (alumbradas por su tecnologia, su vana ciencia y su pretendido paraiso ecologico) de la esclavitud del hombre al hombre, que las cimas luminosas de la Virtud de la Fe.

    No, no creo que este aun tan a las puertas esos tiempos… El ursupador aun se sostiene en las sombras de la sede… engaña a los que quieren ser engañados con palabras falsas que no coinciden con los hechos reales… renuncia pero no renuncia… se va pero no se va… Y los «fieles perplejos», compran toda la idea…

    El rey a abdicado!… viva el rey!

    Que trabajo les falta aun por hacer?… Ya se escuchan rumores de la refundacion del reino abandonado desde hace 2000 años, por obra de Dios y manos de los romanos… viene su falsa paz… enuncian clausulas donde hacen previsiones para cuando llegue «el mesias»… El año pasado, como pocas veces en su historia, «oraron» para que llegase su «reino»… Y este vendra… tendran su reino y su paz…

    Y «Roma» lo validara…

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  3. Como dejamos dicho en el blog ¿ASISTIREMOS A LA ELECCIÓN DE UN LAICO DISFRAZADO DE PAPA?, no perdamos de vista que el falso «mesías» (el esperado por todas las religiones, inclusive por los verdaderos católicos, la cual es en Espíritu y en Verdad, más no con su Humanidad, pues esta ya se dió con la venida de Nuestro Señor Jesucristo, nuestro Salvador), tiene que venir, y no es otro sino «la mona de Dios», que busca imitarlo en todo y hacerse pasar por Ël; y que mejor momento que el actual, en que los ojos de todo el mundo están puestos en la sucesión «papal», al que los medios de comunicación ya llaman el nuevo «lider» de la Iglesia Católica, como si se tratara de un gran ejecutivo y no el representante de Dios en la Tierra, que de hecho y de derecho si fuera el auténtico Papa, lo sería. En cuanto a los muy llevados y traidos comentarios sobre los lemas, yo creo que no debemos perder de vista que en caso de tratarse de profecías auténticas, se referirían forzosamente a los verdaderos Papas, y no a los espurios que hemos tenido en los últimos 54 años, por lo que el lema de Pastor y Nauta correspondería a Giuseppe Siri, y los siguientes a sus auténticos sucesores, por lo que aún no habríamos llegado al lema final, y mucho menos el próximo sería Pedro Romano. No debemos confundir el Fin de los Tiempos con el Fin del Mundo, son dos cosas totalmente diferentes. El fin de los tiempos es una purificación y una renovación la cual realiza Dios cada dos mil años. La primera con el Diluvio Universal, y la segunda con Su venida en Su Humanidad, y ahora después de dos mil años con Su venida en Espíritu y en Verdad, en la cual se manifestará Su Divinidad, y se cunplirá lo que el mismo Cristo nos enseñó en el Padre Nuestro: «Hágase tu Voluntad en la Tierra como se hace en el Cielo». Pidamos a la Santísima Virgen que nos enseñe a pedir la venida de Nuestro Señor como Ella lo pidió hace dos mil años, y digamos «Fiat Voluntas Tua» el tercer «Fiat» de la Creación. (Fiat Lux, Fiat Mihi y Fiat Voluntas Tua)

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  4. Estimble Catolico Verdadero:

    Asi que su tesis o su apuesta (porque estamos en los tiempos de las apuestas!… y de las predicciones… La unica evidencia de que un sistema cientifico es tal, la tenemos tanto en su capacidad de explicar el pasado, como en su capacidad de predecir lo subsecuente)… Perdon! asi que su apuesta es que la Tesis de Siri es veridica?

    Solo que eso nos lleva a una paradoja… Si el Card. Siri ES Papa, como es que no ha sido inmune al error?

    En todo caso, por que obedece a los hombres ANTES que a Dios?…

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  5. Estimable derechosdedios: Da la casualidad de que al ingresar al cónclave, los Cardenales hacen un juramento, y no es ante los hombres, sino ante Dios. Y este juramento se refiere precisamente a NO revelar NADA de lo que suceda en dicho cónclave. Por lo tanto el Papa Siri SI OBEDECIO A DIOS. Además humanamente era y es imposible enfrentarse a la maquinaria montada por los judeo masones para usurpar la Sede de Pedro. Si recuerda hubo periódicos y revistas que lo calificaron posteriormente como un desequilibrado mental que afirmaba que era Papa, y todo esto formaba parte de la campaña en su contra. El Espíritu Santo es quien directamente elige a quien será el Papa, y no creo que hubiera escogido a un hereje manifiesto como Juan Bautista Roncalli, y menos a sus supuestos sucesores.

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  6. Asi que en su opinion, entre la disyuntiva de cerrar las puertas de la Salvacion, de ser parte (pasiva) de la maquinaria que torpedea la Barca de Pedro y la de Obedecer a Dios en la mision de salvar almas, Vd. elige «cerrar las puertas»?

    Cometer un acto de (pecado, traicion, engaño) no implica necesariamente ACCION…
    BASTA CON LA OMISION para «ENGAÑAR» y permitir que sean «engañados»

    Y si estamos que un Papa es INFALIBLE (no puede ni engañar ni engañarse en asuntos de Fe Catolica), como puede engañar a toda la Cristiandad?

    Asi que cual es su postura?
    Un Papa es infalible en cuestiones de Fe o no lo es?

    Cual es el PRIMER deber de un Papa?

    Que yo sepa, es «APACENTAR A LAS OVEJAS», no ser espectador mientras el lobo las masacra, destroza, envenena, dispersa, rebana, despelleja y envia al averno eterno al rebaño.

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  7. Pues sí, estimados compañeros comentaristas, vivimos «tiempos interesantes» desde 1958…así que, lo que salga de ese seudo-cónclave nos dejará más o menos como estamos. Otra cosa es que algunos estén planeando hacer coincidir la presente elección con algún otro acontecimiento de alcance internacional, pero eso, de momento, es sólo conjetura de película de Dan Brown.

    Suceda lo que suceda, debemos tener siempre en mente que la Iglesia Católica sigue ahí, tal como la dejó al morir Pío XII, con la única diferencia, absolutamente accidental, de que los titulares del poder de jurisdicción salieron de ella, así como no pocos fieles laicos. Pero eso no afecta ni a su integridad, ni a su visibilidad.
    Siempre será posible reconocer a los verdaderos católicos por su fidelidad hacia la doctrina auténtica, el verdadero culto apostólico, y el deseo e intención de tener pastores legítimos.

    La lista de lemas papales encierra las identidades tanto de Papas como de antipapas (o que se han tenido luego por tales), como es el caso de nuestro admirado Benedicto XIII Luna (Luna cosmedina), lo que importa es que hayan sido reconocidos notoriamente como Papas, sin que se pronuncie la profecía sobre su legitimidad.

    Pastor et nauta se refiere al Pontífice reconocido notoriamente, aun si realmente hubiese llegado a ser Papa legítimo el card. Siri.

    En lo que se plantea: «Si realmente Siri llegó a ser Papa, cómo es que aceptó, al menos en el fuero externo, los errores del concilio, aunque sólo sea, firmando las actas del concilio como un obispo más?»

    A lo que, sin posicionarme ahora ni a favor ni en contra de la dicha tesis Siri, aporto mi muy personal y particular hipótesis, con la esperanza de que pueda ayudarnos a acercarnos a lo que pudo llegar a pasar, ya que, según palabras del principal interesado, «ocurrieron cosas terribles, que llenarían libros enteros».

    Como decía mi genial aunque incómodo amigo Guillermo de Baskerville, conviene alguna vez elaborar hipótesis aparentemente tan absurdas como las quimeras de nuestros claustros o nuestros pergaminos, porque su misma inverosimilitud puede abrirnos a posibilidades en las que de otro modo nunca habríamos pensado:

    Es bien sabido que las principales naciones del mundo tienen desde hace mucho establecidos unos planos de contingencia que prevén la eventualidad de una situación de crisis en la que el gobierno desaparece, es hecho prisionero, etc…con lo que se impide su ejercicio, se pone en peligro la integridad y quizás la existencia misma de esa nación, y se abre la puerta a que un gobierno ilegítimo ocupe el lugar del primero.

    Sin ir más lejos, aquí en España, cuando el supuesto intento de golpe de Estado del 23-F, una vez quedó claro que el plan A había fallado, se constituyó rápidamente un gobierno de emergencia compuesto por secretarios de Estado, de modo que fuera asegurada una continuidad ininterrumpida, que no dejara lugar a que un gobierno en principio ilegítimo pudiera pretender haber adquirido legitimidad por prescripción, es decir, por haber pasado el tiempo en pacífica posesión, sin que otro gobierno le disputara esa legitimidad.

    Conociendo la situación verdadera del Vaticano (y del resto de la Iglesia) en los últimos años de Pío XII, y que le hizo exclamar que ya no controlaba la Iglesia, y que su poder se limitaba a las cuatro paredes de su despacho, ¿Es creíble que los responsables vaticanos, todavía preocupados por el verdadero bien de la Iglesia, y perfectamente experimentados en las artes del gobierno, no hubieran establecido a su vez unos planes de contingencia aplicables en el supuesto de que ocurriera un acontecimiento cada vez más probable, es decir, que el enemigo completara su conquista nombrando a uno de los suyos como Papa, sin que la Iglesia Romana tuviera a quién recurrir, porque ya no estaba en los tiempos de san Bernardo, en que los emperadores y reyes cristianos cumplían con su deber acudiendo en su ayuda, con la expulsión manu militari del usurpador?

    Suponer tal negligencia sería insultar la memoria de los muy notables prelados que muchos de nosotros han alcanzado a conocer.

    Y sabiendo que los poderes seculares, salvo alguna excepción como la de nuestra España, estaban coaligados contra la independencia de la Santa Sede, y apoyarían con todo su poder la elección de una persona favorable a la instauración de su Nuevo Orden Mundial, ¿Qué camino cabía tomar?

    Como decía el mismo Card. Siri, si hubieran elegido a un nuevo san Gregorio VII, lo único que habrían conseguido hubiera sido un brutal zarpazo de la Unión Soviética, completado por otro más discreto, pero no menos funesto, por parte de las potencias masónico-usureras.

    Bien saben los profesionales de la milicia que cuando se hace imposible defender una posición más amplia sin correr el riesgo real de desbandada de todo el ejército, es necesario abandonar esa posición, y retirarse a otra menos accesible para el enemigo, desde la que pueda lanzarse el contraataque en el momento oportuno.

    En estos casos, hay que tener claras las prioridades, saber lo que debe custodiarse absolutamente, aunque sea a costa de sacrificar casi todo lo demás. En este caso, la prioridad era (y es) la continuidad ininterrumpida de la Iglesia Romana, es decir, del Papado.
    Mientras que la posición que debía ser abandonada, era nada menos que todas las instituciones aparentes de la Iglesia, ya casi completamente tomadas y gangrenadas por la acción subversiva del enemigo.
    Había que pasar a una situación de catacumbas, parecida a la existente en la Unión Soviética, o en Checoslovaquia, en que todo el clero oficialmente permitido, y todavía funcionante con cierta normalidad en las distintas iglesias, parroquias, monasterios, obispados, etc… estaba compuesto, o bien directamente por agentes de los servicios secretos (los rusos recuerdan todavía cómo algunos metropolitas llevaban el uniforme completo de coronel del KGB, con sus hombreras azules y todo, debajo de la riassa (sotana)), o bien, por personal inferior totalmente controlado por los primeros, y que informaban de la identidad, dichos, hechos y omisiones de cualquiera que se acercara por sus iglesias…

    Mientras, en las sombras, existía otra «iglesia de las catacumbas», totalmente camuflada, sin ninguna existencia visible, cuyos obispos y sacerdotes ejercían profesiones civiles (hasta catedráticos de ateísmo científico, o comisarios políticos en el Ejército o la Flota), la mayor parte de las veces casados, y que se servían de sus posiciones para controlar iglesias, que de día funcionaban como museos del ateísmo, mientras que de noche, acogían a un puñado de creyentes que seguían celebrando la liturgia, besando los iconos, etc…

    No eran desconocidos tampoco los casos de agente doble en que un mando del KGB procuraba ayudar a los miembros de las catacumbas.

    Transponiendo ésto al ámbito eclesiástico, significaba que todo lo visible de la Iglesia se dejaba en manos del enemigo (poca diferencia iba a suponer ya), mientras que se ponía en marcha una estructura invisible, pero perfectamente canónica, capaz de emerger a la luz del día cuando los acontecimientos le fueran favorables.

    Para eso, había que convencer al enemigo de que le convenía elegir exactamente a la misma persona que iba a ser la encargada de asegurar la transición y transmisión del poder a la Iglesia de las catacumbas.

    Para ello, se convenció a la jauría modernista de que necesitaban estar absolutamente seguro de que aquél que eligieran para presidir la iglesia oficial no les saliera «rana», como ya les había pasado con algún otro, en quien habían depositado su esperanza, pero a quién nunca habían logrado inducir a enseñar algo contra la Fe, porque lo protegía el Espíritu Santo, asegurándole tanto la indefectibilidad de su Fe, como la infalibilidad de su enseñanza.

    Lo mejor era elegir a un Papa indudablemente válido, obligarlo a renunciar (con lo que se invalidaba la renuncia), para a continuación, elegir a alguien que se convertiría necesariamente en un antipapa, puesto que el trono ya estaba ocupado. Todo lo que ese papa meramente aparente hiciera sería nulo de pleno derecho, lo mismo que sus nombramientos, por lo que hacer limpieza sería extremadamente fácil llegado el momento.

    Una vez establecido el plan, Pío XII multiplicó los actos públicos del Papa, las audiencias generales, los discursos, las peregrinaciones, todo lo que podía hacer para apacentar directamente a los fieles, sin tener que pasar por una Curia gangrenada y fuera de control, en la que ya no podía confiar.
    Sobre todo, multiplicó los gestos explícitos hacia el card. Siri, designándole con claridad meridiana como el sucesor que él deseaba una vez ya no estuviera…

    Todo estaba preparado para el Cónclave de 1958, con su fumata blanca de la que no salió (aparentemente) un Papa, apareciendo luego un elegido que tomó (casualidad, casualidad), el nombre de un antipapa. A buen entendedor…

    ¿Que debió de ocurrir luego? Es posible que el Papa de las catacumbas procediera lo más rápidamente posible a crear un puñado de cardenales, renunciara seguidamente, para que éstos pudieran proceder a elegir a otro, ése sí, totalmente desconocido por el poder adversario que ya ocupaba los puestos de autoridad de la Iglesia, y se disponía a convocar el Concilio.

    Una vez renunciado el Papa en sombras, ésta vez sí canónicamente, aunque las autoridades conciliares lo tuvieran más o menos retenido y controlado en su palacio genovés, les daba exactamente lo mismo, igual que cuando Hitler ordenó secuestrar al Papa Pío XII, y éste escribió una carta de renuncia efectiva en cuanto traspasara la línea blanca, frontera entre el Vaticano y el Reino de Italia. «Ya no tendrán en su poder al Papa, sólo a Eugenio Pacelli».

    Pero claro, había que seguir dando el pego, hacer creer a unos que seguía siendo sólo el cardenal Siri, y hacer creer a los otros que seguía siendo el Papa elegido poco antes de la primera fumata bianca del año 1958.

    Eso explicaría el comportamiento del card. Siri, difícilmente comprensible para quien conociera su horror hacia las infamias conciliares tanto como hacia los pontífices conciliares, a los que conocía demasiado bien.

    Evidentemente, para que «el resplandeciente manto de la autoridad legítima salga de las sombras en las que se mantenía por causa del cisma»
    http://moimunanblog.wordpress.com/2012/08/11/la-profecia-del-digno-pastor/#comment-3424

    http://derechosdedios.info/b2evolution/index.php?title=la-profecia-del-digno-pastor-la-restaura&more=1&c=1&tb=1&pb=1

    será necesaria una intervención sobrenatural, que indicará sin lugar a dudas la persona de ese digno pastor, inclinando al mismo tiempo los corazones y voluntades de los católicos que aún quedan hacia una total obediencia que acabará con «lo scisma sommerso» que dicen por aquí.

    Por cierto, otra cosa que dicen por aquí: «Se non e’ vero, e’ ben trovato»

    Ahora, ¡A disfrutar de la siguiente «fumata nera»!

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  8. Apreciable Fr. Lugo:

    Ciertamente, hay una probabilidad de que asi haya sido…

    Pero, si cotejo esa probabilidad con:

    “Oh mercenario! —grita San Agustín en su Comentario al Evangelio de San Juan—, viste venir al lobo y has huido. Has huido porque has callado, y has callado porque has temido”.

    este dicho, me parece que se reduce…

    Si mal no recuerdo Frisgo decia en otro post que al considerar que su poder se reducia a las cuatro paredes… Yo creo que desde que no pudo hacer la Consagracion a Rusia mas que el solo (pues ya desde entonces, muchos obispos no le obedecian), ya se sospechaba lo que venia encima…

    Porque no salio al balcon a decirnos «Nos vamos a las catacumbas… la Iglesia se queda tal cual… No acepteis al que venga!»?

    Supongo que sera dificil tener una respuesta precisa y taxativa en esta vida…

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