17 de Febrero. San Policronio, Obispo de Babilonia, y sus compañeros, mártires. 251.

Papa San Cornelio . Emperador romano Trajano Decio .

«Yo os daré palabras y sabiduría que vuestros enemigos no podrán resistir y que será imposible contradecir.»
Lucas, XXI, 25.

Martirio de San Policronio y San Parmenio.
Historial Speculum. V. Beauvais. XV.

San Policronio y compañeros mártires cuyo martirio conmemoramos en este día, fue obispo de Babilonia de los Caldeos, en el siglo III bajo el imperio de Decio. Este emperador amo del país por la fuerza de las armas, cruelmente perseguía a los cristianos, y sabiendo que Policronio  era el padre, y como el líder, lo hizo preso y con él a Parmenius, Elimas y Chrysotèle, sacerdotes, y a los diáconos Lucas y Muce. Todos ellos fueron llevados al templo de los ídolos para ofrecerles incienso y reconocer su divinidad, pero Policronio, hablando en nombre de los otros, dijo: «Nosotros ofrecemos el sacrificio de Nuestro Señor Jesucristo, y nunca vamos a inclinarnos ante el diablo, o ante estos ídolos, que fieron hechos por las manos de los hombres. » El Emperador, llevado por la ira, le arrojó en la cárcel y entregó su caso al juicio de uno llamado Apolo Valeriano, junto con los otros mártires que comparecieton ante el tribunal. Preguntado el santo obispo con estos términos: «¿Es usted ese sacrílego Policronio que desprecia a los dioses y príncipes » El santo prelado no le respondió y el emperador, que estaba presente en este juicio dijo a los otros clérigos: ¿ Así qué vuestro jefe se calla? Entonces un sacerdote dijo: Nuestro Padre no se calla sin razón, porque él tiene que obedecer el mandato de Nuestro Señor Jesucristo que dijo a sus apóstoles «Cuidado con echar perlas a los cerdos, no sea, que os pisoteen, y se echen sobre vosotros» ( . Matt VII, 6 .. ) .
.» El tirano, al oír esto, se enojó mucho y mandó que le arrancarán la lengua por haber hablado así». Pero el sacerdote, con la lengua arrancada gritó al santo prelado: «Mi bendito Padre Policronio, ruega por mí, porque veo al Espíritu Santo sobre ti sellando tu boca sagrada y esto pone en la mía la dulzura de la miel. »
Decio ordenó a Policronio sacrificar a los dioses, con lo que disfrutaría de su amistad y se haría merecedor de sus favores. Peto el santo obispo no le respondió palabra, por lo que fue golpeado en la boca tanto que el bendito mártir, levantando los ojos, entregó el alma a Dios en el dolor de esta terrible experiencia.
Decio arrojó su cuerpo en frente del templo de Saturno. La noche siguiente, dos señores famosos persas, San Abdón y San Sennen , que eran secretamente cristiana, lo recogieron y lo enterraron con honores en la ciudad de Babilonia.