ALL POSTS

» DEL GRAN NÚMERO DE LOS QUE SE SALVAN «


En este post ya publicado anteriormente se ha escrito la siguiente cita de Marta Robin, muy de actualidad en nuestros días por haber sido declarada Venerable, por Francisco, el 8 de noviembre de 2014:

Abundando en la teoría mencionada de la ILUMINACIÓN FINAL en los últimos momentos de la agonía, otra mística muy reconocida en la época posconciliar, Marta Robin, “enseñó” explícitamente esta teoría, insistiendo sobre todo en el carácter de la muerte, no como un “instante” sino como un “paso” de duración variable.

Ella dio la siguiente respuesta al testigo que se cita:

Marta Robin como dice uno de los clérigos visitantes ( Maurice de Lesseps O.S.B. de la abadía de Fontgombault,) relata que a propósito de una duda que albergaba sobre la salvación del familiar de un conocido muerto en accidente de carretera en circunstancias penosas, le comunicó lo siguiente:

“Sepa Padre, que el alma recibe una gran LUZ en el momento de la muerte. Pocas almas dicen “No” a Dios, sobre todo entre las de los jóvenes.

Así pues para ella casi todos se salvan, lo que está en línea con la ideología conciliar y quita el temor de Dios por una excesiva y presuntuosa confianza en Dios, o mejor dicho por la odiosa a Dios presunción.

También fue adelantada y promotora del Vaticano II.

El supuesto masón, o afín, Jean Guiton, escribió un libro sobre ella, traducido al español, y que poseo, con grandes elogios a esta supuesta » falsa mística»

AMOR DE LA VERDAD

[Es republicación]

«Del gran número de los que se salvan y de la mitigación de las penas eternas«. Éste es el título de un libro, que causó escándolo en su época, publicado ((f.e.d.a.  Madrid, 1934)  por Fr. Luis G.Alonso Getino O.P. . El título como se constata es, como una réplica del sermón que tanto eco  tuvo y tiene en la iglesia  al que suelen dar el siguiente título: El pequeño número de los que se salvan (Puede verse en el blog una traducción en el post¿Se salvan pocos o muchos?, en el que resumíamos la cuestión así:

Ver la entrada original 2.869 palabras más

1 respuesta »

  1. Hablando del tema de salvarse, hay una cosa que no logro alcanzar y me puede costar la eternidad, esto es el desprenderse del mundo, la lucha contra el mundo. Yo no logro nunca el vencer al mundo, el vencer el respeto humano y demás, me es realmente imposible. Y yo no se si es que no recibo la gracia de Dios o es que la gracia de Dios no puede llegar a tanto. Creo que la razón por la que no puedo rechazar plenamente al mundo y sus honores es por la falta de Fe, porque sinceramente mi Fe es más pequeña que un átomo. Pienso siempre «si viera un milagro, si viera una aparición, ¡qué rápido mudaría de vida!», obviamente jamás me pasará algo de eso porque es solo reservado para grandes santos, y yo no se cómo tener Fe, tener certeza real de que está Dios aquí mismo y demás, porque digamos que ahora tengo una falsa certeza, creo en Dios y soy católico, pero lo veo todo como muy alejado y por tanto no tengo valor para llevar la vida de un cristiano. Yo he pedido a Dios la Fe necesaria para cumplir su Voluntad, pero aún sigo esperando, y los días pasan entre rezar a escondidas y tener vergüenza absoluta de profesar la religión en público, y numerosos pecados también por la falta de Fe y la concupiscencia.
    En fin, si no tengo Fe ¿cómo voy a cumplir el deber cristiano? si la pido y no la recibo ¿a qué se debe y cómo conseguir esa gracia de Dios?
    Yo se que todo lo que se pida con Fe y confianza se consigue, ahora, ¿si no hay Fe ni confianza? Porque al fin y al cabo esas dos también son gracias, y si no se tienen ¿cómo se piden?

    Me gusta