[Como suele ser habitual en este bendito país, al parecer se están ocultando datos importantes sobre el individuo que entró disparando sin cesar en un supermercado de la ciudad de Orense. Hasta ahora no se han proporcionado datos sobre su nacionalidad, origen, grupo racial ni su fotografía. Lo más importante es que se ha ocultado lo que afirman varios testigos: Irrumpió gritando Alá es grande. 

Yo no puedo certificar que esto sea cierto. Sí lo es que todavía no sabemos nada de los datos relativos a su identidad. En un país donde habitualmente se ocultan datos de delincuentes bajo las iniciales de su nombre y apellidos. En un país donde la norma anterior se salta a la torera y se publican nombres y apellidos de «presuntos» delincuentes, sobre todo si son religiosos católicos o «sacerdotes». No importa si después la Justicia establece su inocencia: El daño de la noticia ya está hecho en forma de ignominia social y acusación por elevación al catolicismo en general. En un país donde se protege a deterninados grupos raciales ocultando la identidad del delincuente. Ahora viene la nueva moda importada de Alemania y de Europa en general. No se puede hablar de terrorismo islámico sino de locura de un individuo transtornado. En esto siguen las consignas del «papa» Francisco para quien esa modalidad de terrorismo es violencia. El terrorismo islámico para él es terrorismo, a secas. O bien es «fundamentalismo», existente, según él, también en la Iglesia Católica aunque no puede demostrar que se haya traducido en muertes de víctimas inocentes). En un país donde las mujeres pueden alegar maltrato ante la justicia, y se acepta sin demostrarlo y donde no existe la presunción de inocencia para los hombres casados, algunos de los cuales ha acabado suicidándose. Claro que las verdaderas estadísticas de suicidio se ocultan (porque como dicen es una plaga contagiosa) o a lo menos  no se especifican las circunstancias, el sexo o las razones probables. En un país así estamos condenados a NO SABER.

Y esto sólo es un trasunto de lo que acontece en la Iglesia Católica. En ella lo que sucede dentro de los muros vaticanos está condenado al silencio y a la «Omertà» [omerˈta es el código de honor siciliano que prohíbe informar sobre las actividades delictivas consideradas asuntos que incumben a las personas implicadas] No importa que el «papa» Francisco hable repetidamente de la «transparencia» o de reformas etc.. La verdad de lo que ocurre es muy diferente. Ahora protegida por un régimen de terror, de delaciones y  «vendettas».

Ésta es la noticia que traslado de Alerta Digital : ]

Irrumpe a tiros en un Mercadona de Orense al grito de “¡Alá es grande!” y la policía dice que sufría, cómo no, problemas mentales

Un hombre fue detenido ayer como presunto autor de un tiroteo en un supermercado de la ciudad de Orense, en cuyo interior efectuó varios disparos mientras gritaba “Alá es grande”, según algunos testigos.

El tiroteo se produjo en un establecimiento de la cadena de supermercados Mercadona en el barrio de As Lagoas poco después de las 14:00 horas, momento en que varias personas se encontraban haciendo compras, precisaron las fuentes.

Agregaron que el hombre accedió con una escopeta al interior del establecimiento y efectuó al menos seis disparos, tanto dentro como fuera del supermercado, uno de ellos dirigido a una agente de la Policía local cuando intentaba neutralizarlo.

Como ya suele ser habitual, las autoridades han señalado que el hombre detenido, de 35 años, residente en un edificio colindante al supermercado, sufría problemas psicológicos y llevaba gasolina y pólvora en los bolsillos.

El detenido, del que no se revela su identidad, fue conducido a dependencias policiales y de momento se niega a hablar y no muestra actitud de arrepentimiento alguna, según fuentes policiales.

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