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LAS ETAPAS DE LA IGLESIA MONTINIANA

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[Interesante artículo ya un poco antiguo pero al que hay que añadir las etapas que cubrieron los “pontificados” posteriores al de Wojtyla/Juan Pablo II, que han seguido la trayectoria iniciada con el falso papa Juan XXIII. El “pontificado” (casi da risa utilizar esta palabra) de Francisco es como la lógica consecuencia de una trayectoria de longa data]

 

17 de noviembre de 2017 – «Buceando» en Google, encontré sorpresivamente (buscába otra cosa), un pequeño artículo publicado en uno de mis antiguos sitios: «Verdad Única», actualmente en un archivo de Internet, que me parece interesante reproducir. Data del año 2002. (La foto la agregué ahora, es del 2014) 

 

 


Esta es la «iglesia montiniana actual.
¿O tendríamos que decir iglesia francisquista

LA IGLESIA MONTINIANA

   Lo que estamos viviendo actualmente, tuvo la singular visión de anticiparlo el Rev. P. Joaquín Sáenz y Arriaga, S.J., en 1970, con la publicación de su libro «LA NUEVA IGLESIA MONTINIANA«, en donde denunció que el entonces «Papa» Paulo VI en realidad no era Papa, sino un judío infiltrado disfrazado de Papa.
   Ese personaje, que llevaba colgado al cuello el Efod del Gran Sacerdote Judío (1) y que se quitó La Tiara Pontificia (2),que promulgó el «Novus Ordo», amén de innumerables acciones y actitudes abiertamente en contra de la Tradición de la Iglesia, NO PUEDE HABER SIDO PAPA LEGÍTIMO.
   ¿Cuáles fueron las principales etapas por las cuales desde el Vaticano se propició la APOSTASÍA de la «Iglesia»?

  • La primera etapa fue en 1958 a nivel papal, cuando muere S.S. el Papa Pío XII (el último Papa católico de la historia), y entra a ocupar la silla papal Angelo Roncalli, mejor conocido como Juan XXIII (3) o «el papa bueno» (aunque en realidad era un masón infiltrado (4)). 
  • La segunda etapa fue en 1965 a nivel episcopal, cuando la totalidad de los obispos de todo el mundo acepta e impone en sus diócesis los apóstatas decretos del Concilio Vaticano II que contradicen casi dos mil años de la Tradición y Magisterio Papal Católico. 
  • La tercera etapa fue en 1969 a nivel sacerdotal, cuando prácticamente la totalidad de los sacerdotes en el mundo entero aceptó el Novus Ordo Missae de Montini, es decir, la Nueva Falsa Misa de Paulo VI, la cual no sólo no efectúa la Transubstanciación, sino que es una burla o parodia o remedo simiesco de la Verdadera Santa Misa Católica que San Pío V impuso para siempre. En relación con esto, debemos decir que una insignificante minoría, menos del 0.001%, de los sacerdotes se opuso y resistió la Abominación de la Desolación de Montini. Entre éstos cabe mencionar al R.P. Benjamín Campos, S.J., R.P. Joaquín Sáenz y Arriaga, S.J., R.P. Esteban Lavagnini, R.P. Feliciano Chávez Nolasco y el R.P. José Payá, S.J. 
  • La cuarta etapa fue a nivel masa popular en 1976 cuando prácticamente la totalidad de la feligresía montiniana (seguidora de Montini), integrada por unos mil millones de obedientes ciegos, aceptó el nuevo e inútil ritual montiniano que no produce la Gracia Divina, por una parte, y por la otra dicha feligresía se dedicó a idolatrar a Juan Pablo II (otro falso «Papa»). En relación con esto, debemos decir que una insignificante minoría, menos del 0.001%, integrada por sacerdotes y laicos creyentes fieles a la Tradición de casi dos mil años, se opuso y resistió esta Traición Iscariota. En nuestro país (Argentina), podemos mencionar al los Reverendos Padres HERVÉ LE LAY, RAÚL SANCHEZ ABELENDA y ANTONIO F. MATHET y, entre los laicos, al Ingeniero M. ROBERTO GOROSTIAGA.
     De: LA IGLESIA MONTINIANA

 

 

 
 

 

 

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Categorías:ALL POSTS, Francisco, Juan Pablo II, Juan XXIII, Pablo VI

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4 respuestas »

  1. Ese artículo «La Iglesia Montiniana» lo escribí en el año 2000 y lo publiqué en el año 2001 en «El Defensor de la Fe» (periódico publicado en la Ciudad de Méjico por Rafael Magallón Jacobo).

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  2. En esos tiempos, se generó toda una corriente de «laicos promovidos», que por supuesto eran absolutamente funcionales a las jerarquías falsarias. Estos actuaban como punta de lanza de una operación de descrédito hacia los Sacerdotes que se resistían a celebrar el rito montiniano, que fueron muchos. Estos eran acusados de retrógrados, paralizados en el pasado, que no querían aggiornarse, y otros epítetos de naturaleza política que no vienen al caso, pero que mucho daño hicieron (recuérdese que los jesuitas y otros se plegaron al marxismo en Hispanoamérica).

    Siempre me quedó grabado esto: cómo un Sacerdote que realiza una obra magnífica en un barrio humilde, con rasgos incluso de Santidad, puede ser calificado así por sujetos que ni siquiera un día resistirían el nivel de trabajo y dedicación de este venerable Sacerdote?? Para que hoy venga el sinverguenza de Bergoglio a hablar de una iglesia en salida!! Gran sinverguenzada, gran mentira!! Gran manipulador.

    Puede ser un acto bien inspirado, la delación a quienes simplemente intentan seguir impartiendo los Sacramentos como deben ser? Sobre todo enviaban o impulsaban a los «laicos» a hacer esto!!

    El Padre Fulano bautiza en la Capilla tal sin las charlas!!

    Así fueron imponiendo la organización de las «charlas», de los «audiovisuales», de las «jornadas», de las homilías dialogadas… pero su deterioro fue progresivo, y así degeneró al fin en «misas» de payasos, cánticos heréticos, pentecostalismo emocional y exacerbado, reparto de obleas en vasitos de plástico, danzas paganas en los templos profanados, proyecciones rituales de animales de ojos desorbitados sobre San Pedro, etcétera. Para que después vengan unos falsoderechistas neocon, a decir: el problema es que los adúlteros podrían llegar a comulgar. La respuesta a esto es: déjelos que comulguen, de todas formas eso que les quieren dar es una oblea. Qué tanto problema por una oblea?

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  3. El principio de hierro utilizado por el gran manipulador Luficer, es que el que calla, otorga. Asi, por permisión que muy probablemente corresponde a la vision de León XIII, este «debilísimo»(Fortea dixit) demonio imposta un sistema religioso donde, si no se hace nada, se cae igualmente en apostasía. Es decir: no hay que apartarse de otros sino «de los que creíamos eran de los nuestros», encumbrados en un poder apócrifo que incluye seudopapas y que es una seudoiglesia.

    «Obedecer» es también caer en la apostasía.

    Este es el nudo preternatural diabólico y obviamente no lo deshace el hombre. No es que uno y otro se dan cuenta y voluntaristamente rompen el nudo. No. Requiere intervención sobrenatural.

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