[Es una contundente intervención en el parlamento austriaco. Con buenos modales pero demoledora para el Canciller de la República. Hablando por mí mismo sólo puedo decir que el confinamiento que padecemos está lleno de contradicciones, aspectos ridículos, y preguntas sin respuestas. Lo cierto es que nuestro país está al borde de una bancarrota histórica y yo diría casi al borde de algo que se acerca a la desaparición de su modo de ser secular (creo que no es una exageración). ¡Ojalá me equivoque! El tiempo, sí es que lo hay para hacer comprobaciones, nos lo dirá. Cada vez se va notando más la mano de ese Dios Justo DEL CUAL NADIE SE RÍE.]
Categorías:ALL POSTS
COMENTARIOS RECIENTES