3 respuestas »

  1. Gracias a Dios que volví a encontrarlos. Estaba preocupado pues creía que ya habían cerrado el Blog definitivamente.
    Gracias y sigan adelante.
    Que el Señor se los pague.

    Me gusta

  2. Buenos días,

    Supongo que saben que una de las cosas que nos diferencian de los gentiles es que ellos se creen santos y nosotros pecadores, necesitados de continuas penitencias.

    Y empezando yo mi penitencia de cada día me topaba con una pregunta que no encontraba respuesta: «¿Cómo yo estoy colaborando (yo ahora aquí) a lo que está pasando?». A cómo he colaborado a que llegáramos hasta aquí ya tenía muchas respuestas (fáciles y «que no me hacían sangre», porque eran de pecados perdonados). Le pedía a Dios insistentemente respuestas a mi pregunta.

    Y, cómo no, me ha empezado a dar. El «pequeño» problema es que son bien amargas, que «hacen daño» a nuestro demoniete orgullo y me dificultan bastante completar la penitencia. Y me recuerda todas las maldiciones terribles contra los tibios y de que en estos tiempos los «buenos» (tibios) seremos muy culpables de lo que pase (como se ha publicado en algún artículo).

    Santo sábado.

    Me gusta