
[Traemos el sermón sobre el pasaje evangélico «Beatus venter qui te portavit» del jesuita del siglo XVII Antonio Vieira, sobre el Rosario al que dio el título «Rosario, segundo alumbramiento de […]
[Traemos el sermón sobre el pasaje evangélico «Beatus venter qui te portavit» del jesuita del siglo XVII Antonio Vieira, sobre el Rosario al que dio el título «Rosario, segundo alumbramiento de […]
El Beato Alano de la Roche y el Renacimiento del Rosario San Luis de Montfort Todas las cosas, incluso las más sagradas, están sujetas a cambios, especialmente cuando dependen del libre albedrío […]
MAGISTERIO SOBRE EL SANTÍSIMO ROSARIO LEÓN XIII SUPREMI APOSTOLATUS, sobre la devoción al Santo Rosario, 1/9/1883 SALUTARIS ILLE SPIRITUS, Encíclica sobre la devoción al Rosario y la invocación «Reina del Santísimo Rosario», 25/12/1883 SUPERIORE […]
[Mensaje de Hernán Federico Buteler titulado » [Texto de Clarín] El obispo de Rosario dijo que no autorizó un «cordón humano» de fieles en la Catedral El obispo de Rosario, monseñor Eduardo […]
EXCELENCIAS DEL SANTO ROSARIO II Tomado de Tradición Católica Print PDF Por Mons. Martin Dávila Gándara (SOCIEDAD SACERDOTAL TRENTO) EXCELENCIAS DEL PADRE NUESTRO EN EL SANTO ROSARIO Honramos las perfecciones de Dios […]
DIUTURNI TEMPORIS LEÓN XIII :Sobre la devoción del Santísimo Rosario Del 5 de septiembre de 1898 Venerables Hermanos: Salud y Bendición apostólica I. Protección de Dios y de Maria sobre […]
Nos ha enviado nuestro lector Patricio Shaw un trabajo sobre el Rosario estudiado en su relación con el papado. Sin entrar a endosar todas las afirmaciones- como es mi costumbre en estos […]
(Pulsa imagen) La Iglesia sufrirá en esta ocasión -la noche oscura de la falta de un Prelado y Padre que vele por ellos con amor paternal, dulzura, fortaleza, discernimiento y prudencia. Pero llegará la hora cuando, de una manera sorprendente, arrojaré de su trono al orgulloso y maldito Satanás, aplastaré su cabeza bajo mis pies y será encadenado en las profundidades del infierno.”(Nuestra Señora del Buen Suceso, 2 de febrero 1634)
Agregamos que si en algún tiempo aconteciese que un Obispo, incluso en función de Arzobispo, o de Patriarca, o Primado; o un Cardenal, incluso en función de Legado, o electo PONTÍFICE ROMANO que antes de su promoción al Cardenalato o asunción al Pontificado, se hubiese desviado de la Fe Católica, o hubiese caído en herejía. o incurrido en cisma, o lo hubiese suscitado o cometido, la promoción o la asunción, incluso si ésta hubiera ocurrido con el acuerdo unánime de todos los Cardenales, es nula, inválida y sin ningún efecto; y de ningún modo puede considerarse que tal asunción haya adquirido validez, por aceptación del cargo y por su consagración, o por la subsiguiente posesión o cuasi posesión de gobierno y administración, o por la misma entronización o adoración del Pontífice Romano, o por la obediencia que todos le hayan prestado, cualquiera sea el tiempo transcurrido después de los supuestos antedichos. Tal asunción no será tenida por legítima en ninguna de sus partes, y no será posible considerar que se ha otorgado o se otorga alguna facultad de administrar en las cosas temporales o espirituales a los que son promovidos, en tales circunstancias, a la dignidad de obispo, arzobispo, patriarca o primado, o a los que han asumido la función de Cardenales, o de Pontífice Romano, sino que por el contrario todos y cada uno de los pronunciamientos, hechos, actos y resoluciones y sus consecuentes efectos carecen de fuerza, y no otorgan ninguna validez, y ningún derecho a nadie.
En castellano:Las siete palabras
¿CÓMO TENDRÉ CARIDAD SI -SABIENDO QUE EN UN CAMINO HAY LADRONES Y ASESINOS QUE ROBAN Y MATAN A CUANTOS PASAN- NO SE LO ADVIERTO A LOS QUE SE DIRIGEN A ÉL? ¿CÓMO TENDRÉ CARIDAD SI -SABIENDO QUE LOS CARNÍVOROS LOBOS ESTÁN MATANDO A LAS OVEJAS DE MI SEÑOR? ¿CÓMO TENDRÉ CARIDAD SI ENMUDEZCO AL VER COMO ROBAN LAS ALHAJAS DE LA CASA DE MI PADRE, TAN PRECIOSAS QUE LE CUESTAN LA SANGRE Y LA VIDA A DIOS, Y AL VER QUE HAN PEGADO FUEGO A LA CASA Y HEREDAD DE MI AMADÍSIMO PADRE?”“¡AH! NO ES POSIBLE CALLAR, MADRE MÍA. NO CALLARÉ AUNQUE SUPIESE QUE DE MÍ HAN DE HACER PEDAZOS, NO QUIERO CALLAR; LLAMARÉ, GRITARÉ, DARÉ VOCES AL CIELO Y A LA TIERRA, A FIN DE QUE SE REMEDIE TAN GRAN MAL. NO CALLARÉ… Y SI DE TANTO GRITAR SE VUELVEN RONCAS O MUDAS MIS FAUCES, LEVANTARÉ LAS MANOS AL CIELO, SE ESPELUZNARÁN MIS CABELLOS, Y LOS GOLPES QUE CON LOS PIES DARÉ EN EL SUELO, SUPLIRÁN LA FALTA DE MI LENGUA… TAL VEZ ME DIRÉIS QUE ELLOS, COMO ENFERMOS FRENÉTICOS, NO QUERRÁN ESCUCHAR AL QUE LES QUIERE CURAR; ANTES BIEN ME DESPRECIARÁN Y PERSEGUIRÁN DE MUERTE. ¡NO IMPORTA!” (SAN ANTONIO MARÍA CLARET)
imnumerables teólogos (sin que los papas objetaran) han enseñado la doctrina del Bautismo de deseo y hasta papas como Pío XII han aceptado explícitamente esta doctrina (Por ejemplo en carta a la Unión Católica italiana Ostetriche escribe “El acto de caridad puede bastar a un adulto para adquirir la gracia santificante y SUPLIR EL BAUTISMO.” [29 oct.1951; AAS 43] .para negar a continuación que esto valga a los infantes. Por su parte el Código de 1917 en el canon 737, dice que “el bautismo es la puerta de los otros sacramentos y para todos necesario in re vel in voto”.
San Alfonso María de Ligorio escribió, en referencia a lo dicho por el propio Belarmino: “¿Que algunos papas hayan caído en la herejía, algunos han tratado de probarlo, pero no lo han probado, ni nunca lo probarán; nosotros vamos a probar claramente lo contrario en el capítulo X. Pero además, si Dios permitiese que un Papa fuese hereje notorio y contumaz, éste dejaría de ser Papa, y la sede quedaría vacante. Mas si fuera hereje oculto, y no propusiese a la Iglesia ningún dogma falso, entonces no causaría ningún daño a la Iglesia, pero nosotros tenemos que presumir con justicia, como dice el cardenal Belarmino, que Dios no permitirá jamás que ningún Pontífice romano, ni siquiera como doctor [hombre] privado, llegue a ser hereje notorio ni siquiera oculto “ .
Llegará un día en que el mundo civilizado negará a su Dios, que la Iglesia dudará como dudó Pedro. Ella va a tener la tentación de creer que el hombre se ha convertido en Dios. En nuestras iglesias, los cristianos buscarán inútilmente la lamparilla roja en donde Dios los espera. Como María Magdalena, llorando ante la tumba vacía, le preguntarán: «¿Dónde lo han llevado?» -Papa Pío XII